Ayuntamiento de Ametlla Del Vallès

El municipio y el Ayuntamiento de L’Ametlla del Vallès se ubican en la provincia de Barcelona de la Comunidad de Cataluña. Se localiza en la comarca del Vallés Oriental, al sur de los riscos de Bertí y dista 35 kilómetros de la capital Barcelona.

Sus orígenes aparecen documentados en el siglo XI por su relación con el Monasterio de San Juan de Ripoll y su vasallaje con el Condado de Barcelona. La guerra civil del siglo XV (Revuelta de los Remensas) entre el rey Joan II y las corporaciones catalanas provocaron una situación de caos y bandolerismo que se prolongó con diferentes conflictos que culminaron con la Guerra se Sucesión (1700-14) en la que los órganos de Gobierno catalanes desaparecieron y L´Ametlla pasó a depender de Mataró y de Granollers.

A partir del siglo XIX el Ayuntamiento de L´Ametlla recupera cierta autonomía al decretarse su constitución como municipio y empieza un periodo de mejoras y modernización. En el siglo XX llegan los primeros veraneantes y el crecimiento urbanístico aporta un aspecto señorial y de ciudad jardín.

Declarado reserva de la biosfera, su espacio natural más emblemático es el Parque Natural del macizo del Montseny con alturas que alcanzan los 1.700 metros. En la vertiente vallesana se aprecia el Parque del Montnegre y el Corredor con sus encinares, robledales, alcornocales y pinares. Además de la exuberante naturaleza el entorno descubre dólmenes neolíticos, restos ibéricos e iglesias medievales.

La aparición de los veraneantes, en su mayoría de la burguesía catalana, dejó en la localidad y Ayuntamiento de L´Ametlla des Vallès una de las muestras artísticas más significativas de principios del siglo XX: el modernismo. Su arquitectura se refleja en diversos edificios como el ayuntamiento (1912), la Can Millet, masía del siglo XVI remodelada en 1908, la torre de punta (1911) y la casa del Dr. Grifols.

La cocina tradicional de L´Ametlla es muy variada. Destacan las carnes guisadas con setas, las carrerillas, el baietó con col, el capipota, la botifarra con judías… También muy reconocida es su repostería con dulces como los carquiñolis, los borregos, famoso dulce con más de doscientos años de tradición, los codinets y los celonins.