Publicado el 27 de octubre de 2020



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El consistorio de La Laguna sacará a concurso las dos cafeterías de la zona de la Vega

El Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna ha dado el último paso requerido para publicar la licitación que se ocupará de rehabilitar las cafeterías ubicadas en los parques de La Constitución y Pedro González, una zona denominada como La Vega. Ambos negocios llevan ya cinco años clausuradas y eran un punto de encuentro donde se cometían determinados actos vandálicos.

Alejandro Marrero, el concejal de Hacienda y Asuntos Económicos, reseñó en su comparecencia de ayer ante los medios, que el expediente del proyecto a licitar está ya en su fase terminal, esto es, esperando que el concurso se publique en los boletines oficiales respectivos.

Así mismo, el concejal especificó en qué consiste el contrato que se ejecutará de forma pública, y es que, cada cafetería se licitará por separado. Su cesión y apertura en manos de las empresas adjudicatarias implicará disuadir a los vándalos que pueden rondar por la zona y, además, creará un servicio útil que faltaba en la zona. También señaló que la zona se mostrará más limpia al reactivar unas áreas abandonadas donde las plagas de insectos y la congregación de vándalos se unían de forma continuada.

Dichas cafeterías cerraron su actividad antaño, en el 2016, y desde entonces no despertó ningún interés ni por el Consistorio ni por los vecinos del lugar. No obstante, este último año tomó gran protagonismo, sobre todo tras deteriorarse el lugar con pintadas, destrozos, infestación de bichos y -sobre todo- mala gente que se acercaba por el lugar para actividades sospechosas. Por todo ello, el Ayuntamiento decidió actuar con este proyecto actual de licitación que propiciará su futura reactivación.

Directrices del inicio del proyecto

Uno de los primeros bosquejos del proyecto trazaba que se licitase las cafeterías conjuntamente a las piscinas de Bajamar, creando un núcleo más sólido, mas la idea se topó con impedimentos burocráticos referidos a que la concesión o ampliación de la misma para el espacio ofrecido debe quedar regulada por ser una propiedad municipal -que no es-, pues el acuerdo con el consistorio para su control expira el 2022. Por ello, el Ayuntamiento tuvo que declinar sacar los pliegos y el concurso respectivo sabiendo que solo podría durar durante un año, siendo una inversión de nula salida.

El edil Seguridad Ciudadana también destacó la necesidad imperante que hay de llevar a cabo reparaciones urgentes en los recintos. En junio, se efectuó una tasación para saber el coste total de las obras para rehabilitar ambas cafeterías tras observar los destrozos que tenía tanto en su estructura como en su interior. El importe suscrito fue de 40.228 euros en el caso del parque Pedro González y de 21.005 euros para La Constitución. Ahora, se ha anexionado dicho baremo al análisis que haga el Colegio de Economistas de Tenerife donde se especifique la rentabilidad que tendría dichos establecimientos, todo ello para establecer una carencia de pago de cánones efectivo.

El fin que se busca, declaró el primer edil, es que las instalaciones tengan una actividad empresarial, disuadiendo así a todo aquel que busque hacer pintadas o un mal uso de los espacios públicos, tal y como se ha observado y se ha contemplado en las numerosas quejas de la Asociación de Vecinos del Casco Histórico. Sin lugar a dudas, matizó, la reactivación de las cafeterías implicará un doble beneficio: por un lado, se creará trabajo local, y por otro, se acondicionará debidamente los espacios públicos sin coste alguno para la Administración.

 

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