El Ayuntamiento de Málaga está bosquejando un borrador bastante sólido en relación al problema de los alquileres y sus constantes subidas de precios en la capital malagueña, un hecho que ha llevado a concluir que la mejor forma de combatirlo podría ser incrementar en un 50% el IBI a los grandes tenedores de pisos que estén deshabitados en la ciudad.
En la comparecencia, la edil socialista Alicia Murillo subrayó como en Málaga había un total de 11.000 viviendas sin ningún ocupante, un dato que contrastaba con la subida del 33% en los precios de los alquileres, algo que el Gobierno señaló como el incremento más alto de todos los alquileres habidos en la geografía española. Según los indicios que se extraen de los datos, muchas de esas viviendas deshabitadas proceden de los conocidos como fondos buitres y que pertenecen a grandes tenedores, lo que desemboca en una merma sustancial en los alquileres disponibles con la consecuente subida de los precios.
La iniciativa se aprobó por unanimidad, aunque hubo cierto debate en favor de incentivar que las viviendas salieran al alquiler en vez de penalizar a determinado colectivo, aunque finalmente, se entendió que la medida propuesta era la más acertada con los medios habidos. Ello implicaría que se gravaría con una fiscalidad mayor a los grandes tenedores de viviendas de la ciudad si no ponen sus viviendas en alquiler y las mantienen desocupadas. La idea que generalizó a todos los presentes en la reunión celebrada era clara: frenar la especulación del alquiler de la vivienda y facilitar que los ciudadanos puedan acceder al alquiler.
En colación a tal hecho, el concejal de Economía y Hacienda subrayó que Málaga era una de las ciudades españolas que tiene la fiscalidad más baja en el IBI, lo que daba muchas facilidades a las familias para poder alquilar una. A ello había que sumarle que el Ayuntamiento ya llevaba un total de 5.200 viviendas públicas ofertadas en las dos últimas décadas, un dato que contrasta fuertemente con las únicas 40 que ostenta la Junta de Andalucía. Por ello, desde el gabinete municipal se ha redactado ya todos los puntos que definirán qué es una vivienda desocupada para pasar a incluirlo en el borrador hecho por el Ayuntamiento. Se definirá si estar deshabitada implica no tener contrato de alquiler o no disponer de recibos de suministros, por ejemplo.
Aplicar un IBI diferenciado
El plan aprobado solo requiere de un último sello de aprobación antes de ponerse en marcha, concretamente el estudiar la propuesta de modificación de los tipos diferenciados del IBI en relación al resto de grandes ciudades españolas. Esta normativa específica está sobre todo orientada a los grandes establecimientos comerciales (El Corte Inglés, Carrefour, Mercadona) y su aplicación establecerá una mejoría palpable en los ingresos de las arcas municipales.
Otro punto que ha redactado este plan denominado Adelante Málaga, ha sido aumentar el número de cajeros automáticos disponibles en las fachadas de los establecimientos bancarios, buscando dar mayor facilidad a los vecinos para operar con sus cuentas.