Pasarón de la Vera: municipio de España recomendado para una escapada en pareja

A continuación les presentamos el reportaje de Pasarón de la Vera, el municipio del territorio español que salió vencedor en la encuesta que hicimos en esta misma web para que nuestros usuarios dictaminaran cuál era la localidad preferida para una escapada en pareja.

Pasarón de la Vera está ubicada en en la provincia de Cáceres, comunidad autónoma de Extremadura.

Mapa de la región de Pasarón de la Vera

El municipio de Pasarón de la Vera

El Municipio de Pasarón de la Vera se ubica en la mancomunidad homónima (de La Vera), abarcando un área total de de 38,97 km² y a una altitud de 602 metros sobre el nivel del mar.

Su enclave geográfico en la falda de la Sierra de Tormantos (parte de la Sierra de Gredos) y bañando las orillas del río Tiétar, provoca que en su entorno prolifere una vegetación abundante integrada por castaños y robles. Su peculiar microclima de temperaturas suaves y vientos calmos, hace del lugar un lugar apacible donde ni hace mucho calor ni mucho frío. La protección que le ofrecen los dos montes es más que suficiente para que la localidad presuma de ese acogimiento que tanto se en el turismo de calidad.

Si bien apenas hay vestigios históricos de la ocupación romana, visigoda e incluso prehistórica, existen varios detalles que nos recuerda su extraordinario pasado: escudos con inscripciones, empedrados de calles de claras referencias romanas, la arquitectura de algunos edificios santos y los hallazgos de herramientas de piedra y monumentos megalíticos.

Destacar que Pasarón de la Vera, está declarado Conjunto de Interés Histórico Artístico.

Historia de Pasarón de la Vera

Se tiene constancia documentada que Pasarón de la Vera albergó a la civilización conocida como Vetones, justo antes de que el imperio romano la conquistara. El propio escudo del municipio tiene dubujado un antiguo Verraco de piedra, el símbolo más evidente por esa tribus.

Pasarón de la Vera perteneció a Plasencia hasta el año 1331, cuando Alfonxo XI lo destina a ser villa de señorío para el infante Alonso de la Cerda. Varios años más adelante, en el siglo XVI, sería el conde de Osorno el que se haría con la propiedad de la villa, erigiéndose el Palacio que lleva su mismo nombre y que aún se conserva. El conde avivó mucho el arte del lugar, trayéndose de Italia el estilo renacentista que retrató en la construcción de su palacio.

En la época moderna, y tras la caída del Antiguo Régimen, Pasarón de la Vera es declarado un municipio constitucional. En el año 1834, se incluyó en el Partido judicial de Jarandilla.

Primeras impresiones en Pasarón de la Vera en pareja

Lo primero que intentamos buscar al recorrer el lugar, es el romanticismo que queremos que nos inunde. Numerosas callejuelas y senderos por el monte, todos ellos apaciguados por el silencio de la montaña y la tranquilidad de ser un pueblo rural con poca población, contribuyen a que el pasear con nuestro cónyuge sea una experiencia muy íntima.

Nos hará compañía la suave brisa de lugar, coloridos cerezos e higueras que alfombran parte de su extensión limítrofe, y el canto de las aguas del río bajando de forma paulatina. La sensación que nos atrapa nada más llegar es la de estar en un sitio ajeno a todo lo que conocemos, carente de estrés o contaminación alguna. Muchos la describen como un paraíso terrenal donde el tiempo se estanca para que las parejas puedan renovar sus votos de afecto durante largos minutos de intensa dulzura, el ingrediente principal que transmite todo el lugar.

Monumentos de Pasarón de la Vera que te enamorarán

La Ermita de la Blanca

Nada más llegar al municipio, dejando atrás la vecina localidad de Tejeda del Tiétar, giramos por la carretera a la izquierda y nos topamos con la la Ermita de la Blanca. Su construcción está fechada del siglo XV, ostentando el galardón de ser la más grande de la región de la Vera. Esta construcción conforma la trinidad de ermitas que existe en Pasarón de la Vera junto a la del Cristo y la de la Purísima Concepción que pueden admirarse en el interior del pueblo.

La Iglesia del Salvador

El punto de reunión donde casi todo turista escoge como salida es la Plaza de España, ubicada en el centro de todas las arterias de calles. Allí se aloja el edificio del Ayuntamiento, así como otros edificios de arquitectura típica del lugar. A un lado se puede visitar un perímetro donde se recoge restos romanos encontrados en el lugar.

Tras salir de la Plaza de España, decidimos andar hacia la segunda gran plaza del municipio, la Plaza del Cementerio. Allí nos topamos con la Iglesia del Salvador. Se erigió en el siglo XV y, si bien aún no ostenta el galardón de ser a bien de interés cultural, lleva siendo un firme candidato desde 1982. Su fachada pasa un poco inadvertida en cuestión de ornamentos arquitectónicos más allá de algún dintel o la elaboración del campanario, aunque el interior rompe con esa sintonía. Nos deleitamos con unas imágenes góticas y unos retablos barrocos de increíble belleza.

Lo más curioso de esta construcción, y que la convierte en un monumento muy exclusivo, es que su esbelto campanario está separado de la propia iglesia. De hecho, el campanario data de mucho antes del edificio principal, concretamente el siglo XIII, lo que hace pensar que inicialmente debía ser una atalaya defensiva.

 El Palacio de los Manrique de Lara

Enclavado en mitad del pueblo, y cerca a la Iglesia del Salvador, nos encontramos con el que puede ser el edificio más emblemático del lugar: el Palacio de los Manrique de Lara. Sin lugar a dudas, el palacio es uno de los más hermosos que existen en la zona, haciendo valer su estilo renacentista de brillante composición y detalles.

El palacio data del siglo XVI, y ya impresiona nada más atisbar el enorme balcón decorado con múltiples filigranas y estatuas. Los tejados atraen nuestra vista casi de inmediato para que fijemos nuestra atención sobre las cinco chimeneas de dimensiones fastuosas.

El interior es un museo que presenta muebles, cuadros, losería, arcos y resto de ornamentos típicos del Renacimiento. Prominentes escaleras de piedra blanca conectan los distintos pisos, que albergan a su vez salones y habitaciones de una riqueza histórica y artística sin igual. Por un momento, perdemos la noción del tiempo y nos recorre la sensación de estar regresando a aquella época colonial.

El Museo Pecharromán

Dicho museo está constituido en una casona erigida por los propios Manrique de Lara en el siglo XVI. Aún es visible el escudo de armas álgido e intacto en el zaguán. La primera atribución que tuvo este lugar fue el de escuela pública, siendo ahora un lugar donde poder admirar de forma fidedigna cómo era el lugar. La rehabilitación es perfecta y tanto el edificio como el contenido está protegido por el Patrimonio Histórico.

Dentro podemos admirar colecciones elaboradas por Ricardo Pecharromán y Morales, o bien dejarnos seducir por los más de 150.000 volúmenes que conforman la biblioteca especializada para investigadores del arte de la pintura, la escultura, el grabado, la fotografía y el cine. El 10 de abril de 2015, el edificio pasó a ser la Fundación Pecharromán tras la declaración pertinente del Ministerio de Cultura de España.

Otros monumentos de Pasarón de la Vera

El lugar ofrece muchísimo más para el turista rural que también busca contemplar un patrimonio singular, todo ello sin olvidar la buena gastronomía y el entorno privilegiado que rodea la zona. Así, es de obligatoria visita la famosa casa de Luis Prieto, la ermita del Cristo de la Misericordia y la de San Blas, aunque seguimos destacando que lo más hermoso es el conjunto del municipio en sí. Sus calles recogidas y que trazan una distribución y arquitectura verata, transmiten una belleza a los ojos y a la mente sin igual. Así mismo, destacar la tranquilidad que reina entorno a la Fuente de Los Cañitos, un lugar de recogimiento donde seguro te relajarás.

Si viajes en pareja a Pasarón de la Vera, gozarás desde el primer minuto de un romanticismo palpitante en el ambiente. Sentiréis cómo todo el lugar se rinde a vosotros, dandoos un tributo de tranquilidad y equilibrio que acentuará los abrazos y las sonrisas por estar en un paraíso tan bello.

 

Valoración de ayuntamiento.es