La iglesia parroquial de Wamba, la cual fue declarada Monumento Nacional en Junio de 1931, y que sus orígenes se remontan hasta el siglo VII, es una de las preocupaciones de los vecinos, ya que su techo está bastante deteriorado, hasta tal punto, que supone un peligro para sus residentes y turistas.
El alcalde de Wamba, José Luís Álvarez del Caño, declara “Esta situación ha sido expuesta en diversas ocasiones ante la Consejería de Cultura y Turismo y la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, pero no hemos recibido respuesta ninguna” además de seguir diciendo “Llevamos más de siete años esperando intervención que nos habían concedido, pero nunca llega”.
José Luís Álvarez del Caño, también declaro sobre el proyecto inacabado por falta de fondos “Queremos que la construcción se adapte a la estética del entrono de la iglesia. Sería el lugar idóneo para crear un centro de interpretación del mozárabe, pero lo urgente, es que, por lo menos, se consolide la cubierta, que ofrece un gran peligro de derrumbe. Estamos empezando a perder las esperanzas, pero desde el Ayuntamiento pensamos seguir insistiendo ante los organismos pertinentes. Se trata de una necesidad urgente para el pueblo. Todo el mundo dice que tenemos una iglesia preciosa, pero la situación en la que está es de un desesperante abandono.
El mayor reclamo turístico de la iglesia de Wamba, es su osario, es el más grande de España de esa antigüedad. Se trata de una sobre acogedora capilla de huesos que está rodeada de misterios.
Un impresionante mosaico de varios miles de cráneo, tibias, férmures, posiblemente procedentes de víctimas de la peste negra de los siglos XIV al XVII. Restos que fueron apilados hace algunos años, con sumo cuidado por los propios vecinos del municipio.