El Ayuntamiento de Jaén ha decidido retirar los cristales de las farolas del casco antiguo de Jaén para ahorrar en limpieza y en mantenimiento. La medida también afectará a los barrios del sur de la ciudad. La decisión del consistorio ha preocupado a los vecinos, que consideran que la estética del centro podría verse afectada.
Manuel de Moral, concejal de Mantenimiento Urbano y Participación Ciudadana, ha defendido la propuesta asegurando que permitirá, según los informes técnicos, “ganar en luminosidad, garantizar la seguridad de los vecinos al no haber cristales por su posible ruptura y adaptarse a los tiempos actuales, porque son muchas las ciudades donde ya se han retirado y se han dejado solo las carcasas”.
La disposición del consistorio no ha sido bien acogida ni por la oposición ni por la mayor parte de las asociaciones de vecinos. Antonio Lozano, presidente de la federación Más Voluntades, ha ironizado que “indudablemente, si no se limpian los cristales, los faroles lucen menos”. La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, María del Mar Shaw, ha declarado, por su parte, que con esta medida el consistorio “ha llegado al extremo del surrealismo” y que resulta “vergonzoso que el alcalde, que mensualmente debe pagar un millón y medio de euros en intereses por los préstamos contraídos con los bancos para el Ayuntamiento más endeudado de España, quiera reducir costes quitando los cristales a las farolas. Mientras, está regalando mensualmente 720.000 euros extra a FCC, además de lo que cobra habitualmente, por no tener contrato de limpieza viaria y recogida de basura al día”.
El Ayuntamiento de Jaén es uno de los más empobrecidos de España, con una deuda que asciende a los 439 millones de euros.
