La decisión fue tomada por unanimidad
Ante el acuciante déficit público, los Ayuntamientos de España han decidido suprimir todos los días festivos del año para los trabajadores. Esta decisión radical se debe a la situación insostenible de algunos de ellos, que no hayan soluciones para paliar la deuda pública en la que se encuentran en estos momentos difíciles.
‘No nos ha quedado más remedio que tomar esta decisión’ declaraba un alcalde que ha preferido mantenerse en el anonimato, consciente de la repercusión que va a tener esta noticia, ‘Son tiempos difíciles, todos debemos arrimar el hombro para salir de la crisis’ comentaba otro alcalde que tampoco ha querido que desvelemos su identidad.
Ahora toca esperar la reacción de los trabajadores, que no se hará esperar. En las sedes de los sindicatos la situación actual es de mucho ajetreo y estupor ante una noticia de tal calibre, que nadie esperaba. Lo que está claro es que nadie quería este regalo de Navidad.