Hace unos días nos hacíamos eco de la triste noticia de la cancelación de la las Fiestas del Pilar que tuvo que dictaminar el Ayuntamiento de Zaragoza. Recordemos que es la primera vez en 62 años que se anula la posibilidad de festejar la tradicional Ofrenda de Flores, todo debido a la presente pandemia de coronavirus y los posibles contagios que provocaría. Dicha resolución ha supuesto un lamentable canto de dolor para la ingente multitud de fieles que acuden a la localidad para donar su ramo a la Virgen en devoción.
Las floristerías locales también se han visto muy perjudicadas por la decisión, aunque comprenden que era necesario la cancelación. Por fortuna, el consistorio está estudiando una alternativa que contentará a ambos grupos, tanto a los fieles como a las empresas de venta de flores. Y es que, si bien el ayuntamiento está en proceso de terminar una página web donde se podrá gestionar las ofrendas de forma telemática, ahora ha surgido otra iniciativa mucho más presencial y que la ciudadanía ha abrazado en mejor grado. La idea consiste en que los vecinos de la localidad decoren sus ventanas, puertas y balcones con todo tipo de ramos y flores para dar la bienvenida a la Virgen el 12 de octubre.
Aplicando dicho método, el Ayuntamiento está convencido de que se fomentará y animará el sentimiento popular en un día de tanta relevancia en Zaragoza como es el 12 de octubre. Además, las floristerías no perderán el nicho de mercado tan importante que facturan ese día, pues venderán incluso más flores al estar destinadas ahora a adornar balcones y no solo a ser un ramo que portar hacia la Virgen.
El área de Cultura, no obstante, ha querido ser cauto en sus declaraciones y ha recalcado que aún queda bastante tiempo como para debatir y dar forma a la propuesta. De lo que sí están de acuerdo tanto el alcalde, Jorge Azcón, como la vicealcaldesa, Sara Fernández, es que el contexto presente instaurado por la crisis sanitaria hace que sea inviable celebrar la Ofrenda de forma presencial, ya sea bajo su método tradicional como el que se barajó de controlar aforos y distancias de seguridad, unos puntos que al final se desecharon en favor de ser consecuentes con la realidad social en este tipo de celebraciones.
Según las declaraciones del Ayuntamiento, todo dependerá de cómo prospere la pandemia durante este mes venidero, aunque no se prevé que la situación cambie hasta tal punto que se puede proceder a abrirse la Ofrenda como otros años.
El sector florista asfixiado y en quiebra
Los floristas constituyen un sector poco nombrado durante esta pandemia, mas también han sido uno de los grandes perjudicados tras cancelarse las bodas, las comuniones y casi cualquier festejo donde las flores sean protagonistas. Ahora, tras anunciarse la cancelación de este día tan especial donde las flores dominarían todas las calles, muchos han tenido que sobrevivir con gastos negativos e incluso echar el cierre definitivo.
Pensando en ellos y en la ciudadanía en general, el alcalde ha querido destacar la iniciativa de ornamentar los balcones como una medida que, al combinarla con la página web, resultará en una solución muy beneficiosa para todos. En la web se habilitará que cada vecino pueda subir sus balcones decorados, fomentando así una competitividad sana para ver quien lo tiene más bonito y acentuando que los floristas puedan vender más.
